ENTREVISTA A LEANDRO RISSI

1- COMO ESTUVISTE COMO PRACTICANTE 7 AÑOS FUERA DE LA ESCUELA?

 

En cuanto a la práctica, y en general, fue una etapa muy difícil. Se que es importante poder encontrar lo bueno aun de las mayores dificultades. Considerando eso, fue maravilloso poder experimentar, que a pesar de las distancias físicas y temporales… gran parte de lo vivido en el Mundo Kung Fu, queda internalizado en uno, encarnizado, ya es parte de uno, y no solo no se desvanece, sino que comienza a crecer afectivamente, conectándose cada vez mas con el corazón. Supongo que de una manera u otra, tarde o temprano, a todos nos toca vivir la experiencia, brusca o paulatinamente, del deterioro de lo físico. Estamos materializados en un cuerpo que cumple un ciclo determinado… y muy breve por cierto… así que el “no apegarse” resulta un aprendizaje fundamental.

Pero, existe un tiempo para todo. Un momento, un modo… Y el hecho de que el Kwon… el Conocimiento… Sifu… estuvieran en este presente… de manera concreta, transitando por este plano, honrando la vida, y yo, transitando en otro canal… lo sentí como un desperdicio de lo que hacia con las oportunidades. Si se espera estar el cien por ciento listo para hacer algo, posiblemente nunca haríamos nada. El presente ya comenzó. Es ahora. Tal vez, lo que sentimos que faltaba para transitar por este camino maravilloso que es la vida… lo encontremos justamente recorriendolo.

 

2- QUE SENTISTE CUANDO COMENZASTE NUEVAMENTE A PRACTICAR TUS PRIMERAS CLASES?

 

Fue como una especie de sentimientos contrapuestos encontrados…

Por un lado la comprobación de la falta de entrenamiento del cuerpo al ritmo de clase, que por mas que uno pueda trabajar de manera personal, es abismal la diferencia de intensidad con respecto al trabajo en el Kwon… al de “hacer la clase”, no solo por el ritmo de trabajo físico, sino sobre todo, porque estando allí el Conocimiento, Sifu, el aprendizaje toma un ritmo mucho mayor, la corrección permanente, los detalles, tanto a nivel técnico como a nivel interno… lo que hizo que realmente fuera necesario poner mucho esfuerzo en ir recuperando la regularidad en esto… de hecho, siento que aún estoy bastante inmerso en este proceso…

Por otro lado, la alegría del simple hecho de estar parado sobre el piso del Kwon, con Sifu al frente, y al lado de las personas que conforman este maravilloso Mundo Kung Fu, hizo y hace que todos los vacíos generados por lo que fue esta distancia física, se llenen con la intensidad de lo emocionante que significa estar parado ahí, cuando logramos realmente “estar” parados ahí, completamente, sin que una parte nuestra divague por otros lugares.

 

3- DESPUES DE MUCHOS AÑOS SIENDO UN PRACTICANTE COMO VOS QUE ADEMAS VIAJO AL EXTERIOR Y PUDO PRACTICAR Y COMPETIR AFUERA, QUE EXPERIENCIA DEJO TODO ESTO?

 

La forma de asimilar lo que se aprende, cuando se experimenta, es exponencialmente mayor. Vivir el conocimiento, experimentarlo, lo graba a fuego. Desde lo vivido a nivel físico, técnico, como lo es por ejemplo la competición, haber tenido hasta la posibilidad de comprobar lo que es perder por knockout o la suerte del resultado inverso, como ya pasando a otro plano mas profundo, de vida, en donde adversidades a veces nos aflojan las piernas y noquean peor que el golpe mas fuerte, encontré que los triunfos, pueden ser buenos como un parámetro hacia el cual aspirar, pero una vez que se llega a ellos, en realidad, poco aportan. Ya está. Es más, pueden ser hasta una distracción. En cambio las derrotas, son la muestra más contundente de nuestros errores. Y ahí está la clave, en la evolución que se puede lograr al ir despojándonos de los errores… corrigiéndolos. Pero para eso, primero hay que verlos. Pocas cosas los muestran tan claro como las derrotas. Si logramos no distraernos por el desánimo o desaliento que genera una adversidad, una derrota, esta, es la oportunidad justa de ser mejores.

 

4- HOY CON CASI 40 AÑOS Y 30 DE PRACTICA, QUE LE ACONSEJARIAS A ALGUIEN QUE RECIEN SE INICIA?

 

Lo mismo que les diría a mis hijos. Que decidan inteligentemente. Sean honestos con ustedes mismos en lo que los lleva a practicar.

Kung Fu es un arte extraordinario… pero no es para todos, sin que esto signifique que quien lo practica sea superior o inferior. Elijan inteligentemente las motivaciones.

Por ejemplo, sería muy pobre practicar Kung Fu solo para defenderse. Sí, en cambio, para aprender a controlar el miedo, que es lo que en una situación extrema nos deja indefensos. Controlarlo, y no al revés, es mas efectivo que la mejor de las técnicas, o la mejor de las armas.

O por ejemplo, practicar solo para fortalecer el cuerpo, mejorar la figura, verse mejor ante los demás… En cambio, practicar para fortalecer la seguridad en uno mismo, llenar los vacíos que esa inseguridad provoca, y por ende, en vez de pensar permanentemente en uno mismo, poder brindarse a los demás.

Sean honestos con ustedes e inteligentes en cuanto a lo que los va a conectar con la práctica. Esos son los cimientos. Si esto es sólido, la duda tiene poco lugar, y el resto llega por añadidura.

 

5- QUE CREES QUE EN NUESTRA ESCUELA SÍ CAMBIO. CREES QUE LA ESCUELA CAMBIO ALGO DESDE QUE TE FUISTE? QUE CAMBIO?

 

Creo que el Kwon posee bases tan sólidas sembradas por Maestros… que son inmutables. Principios en base a los cuales, sí, se desarrolla un permanente cambio, que definiría esencialmente, como evolución. Los principios inamovibles del esfuerzo y disciplina para la práctica seria, la investigación constante, trabajar sobre nuestro interior con la técnica como herramienta, pero sobre todo, esto movilizado por el espíritu de que nada tiene sentido si no somos felices haciéndolo, ha llevado a que los métodos de entrenamiento que se van desarrollando, para templar tanto lo interior como lo exterior, van adaptándose a esta evolución, incrementando cada vez más la calidad de un practicante, lo que se ve claramente en los resultados. Hoy en el Kwon hay un crecimiento homogéneo en la capacidad técnica, y más importante, un crecimiento homogéneo en la calidad del grupo humano del cual es un honor ser parte, en el que se puede vislumbrar que hay personas desinteresadas de sí mismas, que diariamente aportan algo que nos lleve a un mundo mejor.

 

6- QUE OPINAS DE TUS COMPAÑEROS QUE VIAJARON A CHINA PARA SEGUIR ESTUDIANDO?

 

Son la clara representación de lo que Sifu siempre transmitió. Demuestran permanentemente con el ejemplo, en los hechos, aplicar el aprendizaje del Mundo Kung Fu. Invertir en conocimiento, a ese nivel, sin ninguna recompensa mas que la de aprender, sin buscar certificados, graduaciones, categorías, publicidad, solo aprender desde un perfil humilde y silencioso. Sumado a eso, retornar a brindarnos ese conocimiento con la mayor de las generosidades.

La verdad que tanto a ellos, como así también al resto de los alumnos avanzados, personas con experiencia de una vida entera, con varias décadas de práctica, en un sistema como el de la escuela, de contacto pleno y disciplina, que siguen formando con temple para “hacer la clase”, con el deseo de aprender como el más nuevo… los admiro. Me siento modestamente orgulloso de ser parte de esa familia, y formar a su lado. Ahí, solo me queda hacer silencio, observarlos… y aprender…

 

7- EN LA ACTUALIDAD EN QUE ENFATIZAS TU ENTRENAMIENTO PERSONAL?

 

Actitud. Para eso no hay límites. Creo que, así como el cuerpo puede llegar a entrenarse llevándolo a un estado relativamente óptimo… pero si este trabajo se suspende, comienza a declinar, envejecer y hasta atrofiarse… lo mismo ocurre con la actitud. Es fundamental forjarla permanentemente, adaptarla a las dificultades nuevas que presenta la vida, vistas como desafíos, oportunidades únicas, a través de las cuales se puede trabajar en algo que no se podría lograr de otro modo. No se puede forjar la actitud desde la comodidad. El resto, como por ejemplo las capacidades físicas, llega por añadidura. Actitud. No podemos elegir lo que nos toca, pero sí podemos elegir que hacer con lo que nos toca, y eso está determinado por la actitud… que en definitiva… define lo que somos.